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Los pueblos más bonitos del pirineo francés
Los Pirineos Atlánticos cerca del País Vasco o los Pirineos Orientales cerca de Cataluña y de la Costa Brava forman la parte francesa más auténtica y tradicional, a tan solo pocos kilómetros de nuestra frontera. ¡Y pueden ser un destino ideal para tus vacaciones!
Pueblos de montaña, medievales o de costa recogen toda la esencia del pirineo francés que no puedes perderte.
Mirepoix
Pueblecito medieval que forma parte de la Ruta de los Cátaros que recorre el Pirineo francés. Entre el gran patrimonio que podrás encontrar en sus calles, destacan las casas pintorescas que caracterizan a Mirepoix y la Catedral de San Mauricio, clasificada como monumento histórico de Francia.
Saint-Lizier
Callejuelas de piedras que te evocarán a un pasado glorioso, en que la ciudad fue sede de un antiguo obispado. No te pierdas la visita a la catedral de San Licerio del siglo XI-XV y la farmacia del siglo XVIII, que hacen de Saint-Lizer uno de los pueblos más bonitos del Pirineo francés.
Sare
El pueblo de Sare se encuentra en la parte de los Pirineos Atlánticos y cuenta con una belleza vasco-francesa. De Sare destaca la gran influencia vasca de sus calles, casas y tradiciones. Visitar la cima de Ruhne mientras contemplas gran parte del paisaje que comparten los pueblos más bonitos del Pirineo francés, es sin duda una visita imprescindible
Villafranca de Conflent
Clasificada como una de las villas más bonitas de Francia y declarada Patrimonio Mundial de la UNESCO, razón por la cual es sin duda uno de los pueblos con encanto del pirineo francés.
Tendrás amor a primera vista con la muralla y la puerta fortificada que envuelve a la fortaleza de Villafranca de Conflent ¡Te sentirás dentro de un cuento medieval!
Saint Bertrand de Comminges
Pequeño pueblo medieval presidido por su espectacular catedral, que podrás contemplar desde cualquier punto de la villa. Saint Bertrand de Comminges se encuentra en el Pirineo francés más profundo y auténtico, ya que està situado en el centro de la cordillera francesa. Además, es una parada obligatoria para los peregrinos del camino de Santiago, que se convierte en una visita perfecta para descubrir la historia de uno de los pueblos más bonitos del Pirineo francés.
Biarritz
El destino imprescindible de la costa del Pirineo Atlántico es el pueblo de Biarritz. Elegancia, belleza y glamour definen a la perfección esta pequeña ciudad que tanto les gusta a los surferos. Más allá de playas con encanto, Biarritz te sorprenderá con sus edificios señoriales de la época dorada del art-déco y el estilo belle époque, nada que ver con la estética del resto de pueblos con encanto del pirineo francés que hemos comentado en este post.
El casino, el Hôtel du Palais y la iglesia ortodoxa Alexandre Newsky representan a la perfección y revelan la personalidad de Biarritz.
Si estás buscando una escapada más cerca o todavía no conoces el Pirineo catalán, te animamos a que pinches aquí y descubras los 5 pueblos del Pirineo Catalán que deberías visitar una vez en la vida.